Cuando inicias una aventura empresarial, habitualmente, tiendes a coger todo tipo de encargos (también conocidos como marrones) normalmente no puedes elegir, simplemente te conviertes en un "tragalotodo" siempre que este minimamente en tu ámbito de acción.
Poco a poco, aprendes a discernir entre los encargos que se ajustan a tus conocimientos y a los requerimientos de los clientes y entras en una dinámica mucho más natural (todo esto asumiendo que has solucionado todos tus marrones y has logrado hacerte un nombre en el mercado)
Entonces tienes otro tipo de problemas, coges proyectos que se ajustan a tus conocimientos, presupuestas todos los proyectos de manera similar aplicas un margen comercial (esto no es una ONG) y entonces te das cuenta que debes ser más selectivo todavía.
Incluso aplicando las mismas tecnologías en todos los clientes, las mismas personas asignadas etc. Algunos clientes quedan satisfechos, incluso te agradecen tus esfuerzos y llegas a establecer un buen rollo significativo y en cambio otros se quejan de la calidad de tus entregas, se quejan del precio y por supuesto te piden que realices tareas no presupuestadas rebajando los precios, como es esto posible ?
La respuesta es que debes distinguir rápidamente si estas frente a un BUEN CLIENTE o frente a un MAL CLIENTE.
Los BUENOS CLIENTES son de todas formas y colores, algunos tienen tan buen rollo contigo que hasta te puedes ir de fiesta con ellos, algunos manejan
grandes presupuestos, otros más pequeños, pero habitualmente no tienen problemas en pagar el trabajo realizado y agradecen el esfuerzo que dedicas a sus proyectos.
En cambio los MALOS CLIENTES son más fáciles de reconocer:
- Te pedirán muchas funcionalidades (debiendo dedicar muchos recursos)
- Te RATEARAN el presupuesto, evidentemente sin bajar sus requerimientos (no entienden la simple regla de mas-funcionalidades=mayor-precio)
- Te machacarán con la calidad y te culparán de todos los problemas del proyecto
- Cambiaran de requerimientos continuamente, no entienden que los cambios provocan desvíos y los desvíos incrementan el precio (si no son por tu culpa, claro)
Y el extra bonus:
NO TE PAGARAN PUNTUALMENTE Y EN EL PEOR DE LOS CASOS NO TE PAGARAN
Las excusas para no pagar son variadas, la calidad, los timings, aprobación de las facturas, temas administrativos varios, se tienen que revisar las horas, el precio por hora es caro, el perfil que se ha dedicado es demasiado junior, INFINIDAD
En catalán incluso existe la expresion "EXCUSES DE MAL PAGADOR", no hace falta ni traducirlo.
Intenta huir siempre de los MALOS CLIENTES, aunque te den mucha facturación, es igual porque con lo que te cuesta cobrar acabaras pagando los sueldos de tus empleados, sus horas extras, los IVAs de las facturas, los impuestos por beneficios y una cantidad de cosas más que tendrás que pedir un crédito al banco, poniendo en riesgo tu continuidad a largo plazo.